Desde pequeña Vanessa Gómez inició a jugar fútbol, las canchas de barrio y el colegio fueron sus primeros escenarios.

Argentinos Juniors le abrió las puertas a Vanessa, esta escuela era solo de hombres, pero eso no fue un impedimento para que Gómez siguiera el camino de sus sueños, con ellos logró aprender mucho y de ahí conoció la escuela que más aprendizaje le ha dado en su carrera como futbolista, La Escuela Bacatá, donde por primera vez pudo entrenar y compartir con mujeres
Estando en Bacatá logró llegar a jugar Liga Bogotá y gracias a ello fue llamada a la Selección Colombia, desde ese instante su carrera empezó a ascender. Los cambios se empezaron a notar, su estado físico mejoró, su forma de pensar y su confianza se reafirmó cada vez más. Gracias a ese proceso y al recorrido que pasó con la escuela, Vanessa debutó a los 17 años. “No puedo describir lo que sentí, ponerme la camisa de un equipo tan grande como lo es Santa Fe es todo un sueño, jugar en el Campín quedará marcado para siempre” nos dice Vanessa ante los micrófonos.
Luego de jugar Liga profesional en Colombia, Gómez dio un paso muy grande, salió al exterior a hacer parte de Atlético Mineiro de Brasil, otra experiencia que le ayudó a forjarse como jugadora. Estando allá conoció el sistema de jugo de las brasileñas, la disciplina y la constancia con la que se debe practicar el fútbol, en el conjunto brasileño duró aproximadamente 8 meses.
“Siempre he pensado que uno tiene que ser su propio ídolo, quiero que las chicas que me vean digan: quiero ser como Vanesa, no por la forma en que juega o se expresa, sino por la persona que soy” . Algunas de las palabras de la lateral Santafereña. Luego de su paso por Brasil, Vanessa llegó a Colombia, en el país ha pasado por Millonarios y Santa Fe, su actual equipo.
Vanessa nos comenta sobre el fútbol femenino en el país, nos dice que hay un progreso. Sin embargo, expresa que vivir del fútbol es difícil. “Hay que pagar casa, estudio y para un contrato tan corto todo es más complicado”, Vanessa espera que los dirigentes cumplan y que la Liga sea más larga y competitiva. Actualmente estudia Marketing y negocios internacionales en la Universidad Sergio Arboleda, su vida está dividida en el estudio y en su profesión como jugadora, “los días son pesados, entrenó en las mañanas y estudio en las tardes”.
Por último, el mensaje de Vanessa para todas las niñas y mujeres que aspiran a llegar a jugar fútbol profesional. “No dejar de trabajar, con sacrificio, esfuerzo y dedicación todo se va a dar, independiente de si la vida ha sido muy fácil o muy difícil si te propones algo, lo vas a lograr. Hay que hacer sacrificios, pero el esfuerzo que haces alguna vez se verá reflejado”.
Realizada por: Adriana Lancheros.
Más historias
Una vida inspirada al fútbol
Por el título: América y Cali definen el campeón de la Liga Femenina 2022
Galería de imágenes: Santa Fe femenino 7-1 Equidad femenino